Puerta de la Misericordia

Construida entre 1517 y 1533, se levanta sobre el solar donde se cree estaba la antigua mezquita musulmana. También estuvo la vieja colegiata que precedió al actual templo. Es de planta rectangular, dividido entres naves paralelas encabezadas por ábsides poligonales. Entre contrafuertes y a los pies de las naves, se abren capillas.

Sus finísimas columnas son lo que más llama la atención, elevándose a igual altura y configuran el espacio en planta de salón; se coronan a modo de palmera que esparce sus nervios, cuyos cruzamientos tienen florones tallados en madera con arabescos y escudos de la ciudad. Diferentes artistas han descrito esta techumbre como una constelación de estrellas.

Son de especial interés artístico el retablo mayor, dedicado a la Asunción, cuyo basamento es de alabastro y estilo plateresco con escenas de la Pasión (Damián Forment). También merece especial atención el retablo de San Victorián. Su pieza principal es el cuadro central y se atribuye a Bartolomé Bermejo o a su escuela.

Fue declarado monumento nacional en el año 1931.

La devoción popular profesa especial veneración al Santo Cristo de los Milagros. Y en nuestros días a la memoria del obispo mártir, beato Florentino Asensio quien tiene una capilla, en la que reposan sus restos junto a otros mártires: los beatos Claretianos de Barbastro y sacerdotes diocesanos.